Una vez más os invitamos a acompañarnos en la lectura de este resumen para conocer las novedades más interesantes de esta semana en la intervención arqueológica del yacimiento de San Esteban. El trabajo de campo durante esta semana ha venido condicionado por las lluvias y las medidas de protección que eso conlleva, es decir, la cubrición con lonas de las diferentes zonas de intervención.

Al tratarse de la penúltima semana de excavación y aunque la lluvia ha condicionado los trabajos en campo, en maqbara hemos podido acabar de excavar dos tumbas, hallando su límite en un estrato amarillento y arcilloso que, como viene siendo habitual, ha requerido la toma de muestras de tierra para flotación. Por otra parte, hemos acabado de tomar muestras de paleoparasitología en los restos óseos excavados, dejando todo listo para enviar las muestras al laboratorio.

Además, hemos contado con la visita del equipo de palinología de la UMU dirigido por el profesor José Carrión, que ha tomado las muestras pertinentes de varias tumbas y muros de la maqbara, así como del Recinto I, para contribuir al estudio palinológico del yacimiento de San Esteban.

En la crujía occidental esta semana los trabajos arqueológicos han tenido lugar en los espacios 4, 5 y 12, así como en una de las atarjeas del Recinto I situadas en la Calle N. Por un lado, en el espacio 12 se ha continuado excavado el sedimento situado entre la estructura de adobes y la estructura de ladrillos halladas en este espacio. Tras la excavación de este sedimento hemos podido ver la relación estratigráfica de la estructura de adobes en relación al resto de estratos. A su vez, en el espacio 5, hemos terminado de excavar el sedimento que aparecía cubriendo a un pavimento de mortero de cal. Con la excavación de este sedimento se han podido recuperar fragmentos de revoco blanco de los enlucidos de las estructuras de este espacio.

Por otro lado, en el espacio 4, hemos terminado de extraer con el protocolo de recogida de residuos orgánicos todos los fragmentos cerámicos y vítreos que aparecieron en la zona norte de este espacio. Además, se ha excavado el sedimento asociado a estos materiales, el cual aparece cubriendo a un pavimento de mortero de cal.

Los trabajos en la crujía norte han continuado centrados en la gran sala norte, donde, a pesar de las lonas protectoras, el agua de las continuas lluvias del fin de semana penetró provocando la formación de pequeñas zonas de barrizal, lo cual no ha impedido continuar excavando el potente estrato arcilloso con restos de carbones que aparece en extensión en todo el espacio; así como en el espacio 10, en la zona del pórtico, donde se ha delimitado y dejado a vista el nivel de pavimento de mortero que pudimos identificar la semana anterior.

En cuanto a la intervención en la Calle N,  se ha excavado el sedimento que aparecía rellenando el orificio de una de las atarjeas del Recinto I. Dentro del relleno de este sedimento hemos podido recuperar una cazuela y un ataifor, los cuales también hemos  extraído siguiendo el protocolo de recogida para el posterior análisis de residuos orgánicos de su interior.

Pese a las condiciones climatológicas adversas, han proseguido los trabajos de consolidación y restauración de los muros y la excavación del espacio 3 del Recinto II. En la sala de este espacio se retiró la capa superficial humedecida por las lluvias, identificándose un nuevo sedimento arenoso de color amarillento. Al mismo tiempo, en la alcoba se ha continuado la excavación del sedimento marrón y arcilloso, detectándose una mayor concentración de carbones. Por este motivo se ha procedido a la toma de muestras de tierra para flotación siguiendo el sistema de cuadrículas previamente establecido. Además, se ha identificado una acumulación de ladrillos fragmentados y un  nuevo estrato, razón por la cual hemos procedido a la documentación fotográfica y la toma de cotas.

Ya metidos de lleno en la recta final de la excavación, la semana que viene nos dispondremos a ultimar el trabajo de campo en el yacimiento arqueológico de San Esteban, continuando con el lavado de cerámica y finalizando la flotación de las muestras de sedimento tomadas de las distintas zonas de excavación. Esta labor se complementará con los diferentes análisis y estudios que se realizarán tanto en diferentes laboratorios españoles y extranjeros, como en el Laboratorio de Arqueología de la Universidad de Murcia en los próximos dos meses. ¡Muchas gracias por vuestra compañía y feliz semana!